Blogger killing blogging. La información como arma de tortura

Cada vez que hacen cambios en la interfaz de Blogger me echo a temblar. Nos avisan de que el jueves cierran el server, 10 minutos (10 minutos en dinero digital debe ser gigantesco ¿cuántos millones de dólares puede dejar de ganar Google en ese tiempo, el que tardas en pensar algo improbable o comerte una uña?). Pero ya esta mañana la interfaz es nueva, supongo que como adelanto a lo que vendrá. Ahora me dice el número de seguidores que tiene este blog. La sociedad de la información tambien es esto. La información como arma de tortura.

Desactivé el contador de visitas hace meses porque porque no son más que datos muertos, un simulacro de conocimiento para hacerte creer que controlas lo que hay al otro lado. A vosotros, los que leeis. Mentira. No controlas absolutamente nada y esa es la magia de escribir un blog. Para mí este lugar (que no es un no-lugar à la Augé, es un lugar con todos sus consecuencias, que se cuida, se amuebla, se habita) sigue siendo un mensaje en una botella que de vez en cuando vuelve a mí con un mensaje inesperado. A veces regresa en forma de comentario pero la mayoría de las veces el intercambio ocurre fuera. Alguien que se te acerca y te comenta algo que escribiste hace meses y no recuerdas, que te envía un email tímido y cauteloso (no te quiero molestar…; por favor, hazlo!), que te recomienda tu propio blog porque no sabe que eres tú quien lo escribe.

Al principio, cuando tener un blog era sinónimo de no tener amigos, cuando no era un hype ni una forma de ganar dinero, cuando era un puro ejercicio de aventurosa gratuidad, estábamos perdidos en la nada. Y esa nada lo era todo. Porque no era nada, cualquier cosa era posible. No había forma de controlar la botella lanzada al mar. Claro que escribo para que me quieran pero no quiero que sea Blogger quien me dé la medida. No quiero que se inmiscuya entre vosotros y yo. Lo que nos une no lo puede entender. No cabemos en sus algoritmos.

Posted in esto no tiene nombre, sociedad red | Leave a comment

“No somos vuestras abuelas”. A propósito del edadismo.

A raiz del post sobre las Old Women Movement me contactaron del periódico Diagonal para escribir un artículo sobre el tema del edadismo (que reproduzco a continuación). Aprovecho también para contestar a la pregunta que me hace Salta aka L. C. de Diagonal en el post Feminismo para dummies 1: “¿Quién se inventó el término edadismo?”

Edadismo es la única traducción que he encontrado para el término inglés ageism. En castellano es confuso: normalente ageism se traduce como envejecimiento de la población pero también tiene otro significado que es la discriminación por razón de la edad. Como edadismo no me convencía envié un par de mensajes a mailing-lists especializadas en género y a algunas “expertas” de mi entorno cercano. La respuesta fue un silencio absoluto que interpreté como un ni puta idea coral. Así que acabé usando el palabro edadismo, aunque a mí también me parece muy feo (pero el gusto se educa, ya sabemos).

ACTUALIZO con dos referencias.
La primera a través de un comentario de Eloy Fernández Porta el 5 de junio de 2009:  “En cuanto al término “edadismo”, que yo sepa lo elabora por primera vez David Cooper en “La gramática de la vida”, en el contexto de la crítica anti-psiquiátirca a las instituciones. No pondría la mano en el fuego que esa sea la primera vez en la Historia de las Ideas que se usa el término, pero lo cierto es que Cooper lo define y elabora como si fuera invención suya, y sin citar ningún antecedente.”
La segunda a través de un tuit de @teclista el 31 de diciembre de 2011: “…he descubierto q la UE lo llama ‘edaísmo’: http://bit.ly/uABwCE

Y ahí va el artículo (aquí en la web de Diagonal).

“No somos vuestras abuelas”

El colectivo Old Women Movement, pionero en la lucha contra el edadismo, denuncia la discriminación de las mujeres viejas y los estereotipos sociales que pesan sobre ellas.

“Las mujeres viejas estamos en la primera linea en todas las cuestiones de justicia social, no sólo las que se supone que nos afectan de forma más directa como la sanidad o los servicios sociales. Nuestro objetivo es acabar con nuestra invisibilidad y con las actitudes discriminatorias que nos ignoran, nos banalizan y nos degradan. No hablamos de respeto, porque el respeto muchas veces está teñido de condescendencia. Hablamos de igualdad.”

Quien se expresa así es Cynthia Rich, integrante junto a Mannie Garza y Janiec Keaffaber del colectivo activista Old Women Movement, fundado en San Diego, California, en 2001.Old Women Movement surgió tras la muerte de Barbara MacDonald, ensayista y pionera en la lucha social contra el edadismo, una forma de discriminación tan invisible y arraigada que casi no se conoce ni su nombre.

El edadismo está muy interiorizado, incluso por personas que en otras cuestiones son progresistas y entre los propios viejos. Está tan metido en nuestros hábitos que ni siquiera sabemos reconocerlo.

En su web el colectivo señala algunos ejemplos de conductas típicamente edadistas como preguntar sistemáticamente a las viejas por su salud, halagarlas diciendo que aparentan menos años o felicitarlas y sorprenderse cuando hacen algo que en personas de otra edad se considera normal, como acudir a manifestaciones o firmar manifiestos activistas. Con el edadismo como eje, estas tres mujeres participan en los movimientos sociales californianos desde 2001. Su primera acción sentó las bases de la lucha contra la especulación inmobiliaria en San Diego y en 2003 organizaron protestas contra la invasión de Irak y un luto silencioso en varias fronteras internacionales en solidaridad con las mujeres iraquís.

Llevamos años en esto y sin embargo hay compañeros que nos siguen haciendo comentarios condescendientes como Veamos si estas señoras necesitan algo. Como si no pudiéramos ser más que personas dependientes.

El edadismo no es sustancialmente distinto de otras formas de discriminación como el racismo o la xenofobia y buena parte del trabajo empieza por el lenguaje, por reivindicar el uso político de la palabra cargada de desprecio: vieja.

Es una descripción fáctica, no un insulto. Mientras siga siendo humillante que te llamen vieja seguirá siendo humillante ser una vieja.

Y también aquí el cuerpo es uno de los campos de batalla.

Se nos ha hecho creer que nuestros cuerpos son horribles y debemos avergonzarnos de ellos, que es natural que los otros sientan rechazo hacia nosotras y que todas las demás mujeres hacen cualquier cosa para no tener nuestro aspecto.

Rich insiste en que la discriminación por razón de la edad no afecta por igual a hombres y mujeres y que el edadismo es una forma de sexismo. El mundo está gobernado por hombres viejos pero las mujeres de la misma edad se ven completamente excluidas de la esfera pública, encerradas en un estereotipo que las reduce a sus roles en la familia. Del mismo modo que en los sesenta y los setenta se deconstruyó la idea social de la mujer, hoy es necesario deconstruir los estereotipos que pesan sobre las viejas.

Hasta hace poco las mujeres sólo existíamos dentro de la familia, como madres o esposas. La esposa modélica de los años cincuenta era sumisa, dependiente e inofensiva. Con nosotras pasa lo mismo. Estamos reducidas a la figura de la abuela, aunque ni siquiera tengamos nietos.

Claro que hay excepciones notables de mujeres que, pasados los sesenta, han llegado a puestos dominantes en la política o en la sociedad. Es lo que las Old Women Movement califican como tokenismo: permitir que personas de sectores marginados accedan a los privilegios del grupo dominante sirve para mantener el estatus quo y hacer creer que no existe realmente un problema de discriminación. Aunque las protagonistas de las revoluciones feministas en los sesenta y los setenta hoy están llegando a viejas, el edadismo nunca ha formado parte de las agendas feministas. Faltan modelos de referencia, espacios en los que compartir experiencias y diálogo intergeneracional.

Las mujeres llegamos a viejas sin saber nada sobre la invisibilidad y la exclusión con las que vamos a encontrarnos. Y lo peor: habiendo interiorizado todos los estereotipos sociales edadistas.

En opinión de Rich es crucial que las mujeres entiendan que, al aceptar los estereotipos sociales sobre las viejas, se tienden una trampa futura a sí mismas.

El poco poder que pueda obtener una mujer por ser joven lo pierde por cada año que envejece. La de 30 pierde poder por no tener 20, la de 40 por no tener 30, etc. El edadismo desempodera a todas las mujeres, cualquiera que sea su edad.

En sus acciones las Old Women Movement siempre acuden acompañadas de una gran muñeca con el rostro de la artista alemana Kathe Kollwitz y ataviadas con camisetas diseñadas por ellas mismas en las que se puede leer Las viejas somos vuestro futuro. Un buen lema para empezar a mirarlas con ojos distintos.
Posted in feminismos, post-colonial, post-politicas | 6 Comments

Feminismo para dummies 2 | La vida doméstica

Quedarte en casa a blogear cuando en la calle hace 10 grados bajo cero no tiene ningún mérito. Pero ahora, después de tantos meses de semi-oscuridad y con lo que pasa ahí fuera, es otra cosa. En Berlin los cambios de estación son radicales y la primavera ha llegado con una contundencia que te reconcilia con el planeta. Es una tranquilidad comprobar que existe y está vivo, girando alrededor del sol como siempre (uf…). Por suerte un par de lectoras han mantenido activo este blog en mi ausencia, intercambiandose mensajes sobre la exposición de Eulalia Valldosera en el Reina Sofia (“éxito de crítica y público”).

Lo que viene a continuación es un collage de algunos fragmentos del capítulo “La mujer casada” de “El Segundo Sexo” de Simone de Beauvoir que releo esta temporada (en pleno revival de feminismo primitivo, yeah). Traduzco y comparto la parte dedicada a la psicología del ama de casa como una nota a pie de página a esa exposición. Pero antes aclaro: Beauvoir escribe sobre las mujeres de la burguesía francesa en la posguerra y mucho de lo que cuenta ya no nos parece aplicable a nosotras. Hoy la casa ya no es el lugar de todas las mujeres, por suerte. Pero todas (todas) sabemos lo que significa. Lo hemos visto en nuestras madres, abuelas, tías, amigas un poco clasiconas, en las series de televisión, los anuncios, el cine, la literatura… La relación entre las mujeres y la vida doméstica forma parte de nuestra memoria colectiva. Y aunque muchas cosas hayan cambiado (sobre todo en el norte del mundo), algunos rasgos de los que describe Beauvoir son tristemente actuales.

El ideal de la felicidad siempre se ha materializado en la casa. Entre sus muros la familia se constituye en una célula aislada y afirma su identidad más allá de las generaciones. El pasado puesto en conserva en forma de muebles y retratos de ancestros prefigura un futuro sin riesgo. En la casa, ni el tiempo ni el espacio se escapan hacia el infinito sino que giran bondadosamente en círculo. En todas las civilizaciones fundadas sobre la propiedad inmueble hay una abundante literatura que canta la poesía y las virtudes del hogar. Esta es una preocupación específicamente femenina. El hombre considera los objetos que lo rodean como instrumentos, los dispone de acuerdo con el fin al que están destinados y no le interesa el interior porque encuentra una afirmación personal en sus proyectos. Su vida diaria le da acceso a todo el universo. La mujer sin embargo está encerrada en la comunidad conyugal. Para ella se trata de convertir su casa en un reino. Encierra entre sus muros la fauna y la flora, los paises exóticos, las épocas pasadas, encierra a su marido que resume para ella la colectividad humana y a sus hijos que representan, en forma portatil, todo el porvenir. Como un contra-universo, la casa se convierte en el centro del mundo e incluso en su única verdad. La casa es para la mujer el lote que le ha tocado en la tierra, la expresión de su valor social y de su verdad más íntima.

Hay pocas tareas que se parezcan más al mito de Sisifo que las domésticas. Día tras día, hay que fregar los platos, quitar el polvo, lavar la ropa. El ama de casa se limita a perpetuar el presente, no tiene la sensación de conquistar ningún bien positivo sino de luchar indefinidamente contra el Mal. Una lucha que se renueva cada día, un eterno presente inútil y sin esperanza. Todas las doctrinas de la trascendencia y la libertad subordinan la derrota del Mal al progreso del Bien. Pero la mujer no está llamada a construir un mundo mejor. La casa, la habitación, la ropa sucia, el parquet son cosas paralizadas y ella solo puede expulsar indefinidamente los principios nocivos que las atacan: el polvo, las manchas, la suciedad. Como si la vida no fuera más que promesa de descomposición. El gusto por las tareas domésticas proviene del deseo exasperado de reinar sobre un universo, de una exuberancia viva y de una voluntad de dominación que, a falta de objeto, cae en el vacio. Es también un desafio al tiempo, al universo, a la vida, a los hombres, a todo lo que existe.

Y sigue Beauvoir con la relación entre las mujeres y la cocina (esa ciencia), pero lo dejo para otra ocasión.
La foto es de Parker Day.

Posted in feminismos | 5 Comments

"White on White. A film noir" by Eve Sussman y la Rufus Corporation

Yuri Gagarin’s Office. Eve Sussman.

El último proyecto de Eve Sussman y la Rufus Corporation es un film negro rodado en Kazakstan sobre la transición del comunismo al capitalismo. Ethan Zuckerman:

Se podría considerar un documental didáctico pero no lo es. Es un encantador y lírico film de arte y una historia de intriga. And I cannot wait to see it.

“White on White” tiene un diario de viaje en formato blog:

Moscow is just monstrously big. Big and wide, fat, monstrous and low, brash and intimidating. Like a bulldog in a thong and heels. The Humvees and the money pumping. Times Square and Vegas scattered throughout the Soviet blocks. Parallel retro-future in the accelerated progress of decline: rusty caged elevators; padded double-doors; strange magnetic-coded locks; underground street-crossings so the traffic never stops. Every car is a taxi-cab: you hail down anyone and pay them to take you anywhere. The subways descend to howling depths and grand subterranean dance halls illuminated by Victorian and Nouveau tube lights and chandeliers. God was great; God was good; now we go to work. Over-sized garbage cans hurtling through the black future-tunnels. Underground, underground, all we all go down and live inside the night of the new life. The new light. The white nights. Light speed now.

Y, si he entendido bien, estará del 23 al 28 de junio 2009 en el Festival Media Forum de Moscú.

Posted in audiovisual, eastern moods, otros artes, post-colonial | 2 Comments

Ted Nelson, el enfant terrible de la historia de Internet


Ted Nelson en su casa. La foto es del New York Times

Dice Wired que la suya es “la señal de humo más larga de la historia de la industria de la computación”. Bueno, la suya no. En realidad la de Xanadu, el primer proyecto de hipertexto que fundó en 1960 y que podía haber cambiado Internet tal y como lo conocemos. Se queja mucho, pero Ted Nelson tiene la enorme suerte de ser el outsider por antonomasia de la historia de Internet, la cara B de la versión californiana encarnada por Tim Berners-Lee, el inventor de la World Wide Web en su diseño actual. Esa otra historia de Internet, Nelson la revisa, con chismes e irónica amargura, en su último libro, “Geeks Bearing Gifts: How the Computer World Got This Way” editado por él mismo a través de Lulu.com.

My prediction for the future – This is going to be one of the most important, and potentially one of the most influential, computing books ever. Wendy Hall, president of the Association for Computing Machinery. The world society of Computer Scientists.

Crecido en el Greenwich Village de New York, hijo de un director de cine y una actriz, Ted Nelson es el papá de palabras tan célebres como hipertexto (y dicen que también de hipermedia, casi nada) y de ideas tan brillantes como la del botón de ir hacia atrás de los navegadores. Para él, la versión actual de la web es una banalización de su diseño original que incorporaba el concepto de link de doble dirección: es decir, que el hiperlink debía apuntar hacia adelante y hacia atrás para proteger “el linaje intelectual de cada documento”.

Today’s popular software simulates paper. The World Wide Web (another imitation of paper) trivialises our original hypertext model with one-way ever-breaking links and no management of version or contents”

En su nuevo libro, la portada es para Bill Gates inmortalizado en su faceta más sexy, cuando fue detenido por la policía en 1977:

Esta es quizás la imágen más fascinante y atractiva que tenemos de él, irradia dulzura y confianza en sí mismo. Se puede ver que tiene algo entre manos y los policías no tienen ni idea de lo que es.

Y continúa con Micrososft y Windows, que considera el resultado arbitario de prácticas comerciales pero no de la evolución inevitable de la tecnología.

Durante mucho tiempo me ha alarmado la facilidad con la que se ha aceptado la expresión “computer technology”, suena tan objetivo e inexorable, cuando la mayor parte de la tecnología no es más que un puñado de ideas convertidas en convenciones y paquetes.

Un resumen de los capítulos de “Geeks Bearing Gifts” aquí.
Y para más morbo: “The Curse of Xanadu” publicado por la revista Wired en 1995 (en opinión de Nelson, “una pieza deshonesta y cobarde de sucio periodismo”) y su respuesta.
Posted in hacking, sociedad red | 1 Comment

Feminismo para dummies | Lección 1ª

Documental de Virginie Linhart sobre Simone de Beauvoir (de 2007 con subtítulos en castellano, 50 min aprox.).

También hay otro, de Josée Dayan y Malka Ribowska titulado “Simone de Beauvoir” de 1982. En amazon está la referencia de la edición en VHS. Parece que, a pesar de sus muchos premios, no ha sido reeditado 🙁

Posted in audiovisual, feminismos | 14 Comments

Gestión de la creatividad: estrategias de fracaso

Cómo son las cosas. Llevo cinco días en Amsterdam reunida con el grupo Mycreativity que desde hace 2 años intenta construir un contradiscurso crítico sobre las industrias creativas. Y paf! Me llega un email sobre Bizkaia Creaktiva I Forum Internacional de Industrias Creativas, que organiza la firma Creativity Zentrum a finales de marzo en Bilbao y que es un ejemplo perfecto de malas prácticas en la gestión de la creatividad.

Bizkaia Creaktiva está dirigido al sector empresarial de la forma más burda y previsible. La economía está cambiando, hay que reaccionar rápido y reorientarla hacia la creación de intangibles. ¿Pero podemos imaginar formas de hacerlo que no se traduzcan en pura y simple acumulación de capital? ¿Que tengan en cuenta que la economía puede ser un factor para el desarrollo colectivo, y que lo necesitamos urgentemente? ¿Somos capaces de aplicar nuestra creatividad para imaginar escenarios de intercambio que vayan más allá de un horizonte condenado a destruirse a sí mismo?

Pero ni siquiera es una cuestión de ética sino de pragmatismo. Estas estrategias simplemente no van a funcionar porque la creatividad no puede industrializarse, ni se pueden conseguir resultados diferentes si no se cambian también los formatos, ni es posible fomentar la economía de la creatividad dando la espalda a quienes la producen.

Nos hemos reido mucho en el grupo con el folleto de Bizkaia Creaktiva. Ninguno de nosotros acudiría a un evento para escuchar a un puñado de consultores hablar de lo que se supone que somos, ninguno se tomaría en serio un acto sobre creatividad que pone al “público general” (es decir, a la creatividad social) a la cola detrás de “instituciones, organizaciones colaboradoras, ponentes e inscritos”, en el que sólo participa una mujer (empatía, diversidad, soft power como ejes del nuevo management ¿os suena?), que es organizado por una empresa que añade un signo de copyright en el programa (¿qué idea están registrando? ¿la de organizar un evento? ¿la lista de invitados? ¿el nombre de la conferencia?), que se cierra con un cóctel que seguramente costará lo que cualquiera de nosotros gana en un año y en el que sólo podemos participar -nosotros, los susodichos creativos- como oyentes y previo pago de una entrada de 50 euros.

Señores y señoras de la política profesional: están siendo ustedes engañados.

Posted in creative_economy, nueva y vieja economia, post-politicas, sociedad red, urbano | 6 Comments

Je suis venue te dire que je m’en vais: (not)bloging from Winter Camp



Je suis venu te dire que je m’en vais es el título de una canción de Serge Gainsbourg que resume el espíritu de este post: lo escribo para decir que no voy a blogear. La cobertura del Winter Camp es amplísima:

The conference seems to be working, rather than notworking (un guiño a “The Principles of Notworking”, de Lovink y el principio de la historia que me ha traido hasta aquí: no, no es literatura situacionista). Members of different networks mingle at seven in the morning when the breakfast room opens and at ten at night when the evening entertainment ends. In between sessions they gather outside for cigarettes and more conversation. (A lot more people, Americans as well as Europeans, are smoking here than at other conferences I attend. I figure it’s because they’re artists; they don’t think logically)

Las imágenes de arriba son los esquemas de nuestras sesiones plenarias, sobre las políticas de los networks. Super interesante. Pero después de la larga jornada de hoy y las 4 que nos quedan, yo me voy a por más cerveza, como hacen los verdaderos networkers.
Posted in post-politicas, sociedad red | Leave a comment

Campo de invierno para redes des/organizadas/bles: Network Cultures Winter Camp

Mañana me voy al Winter Camp que organiza el Institute of Network Cultures en Amsterdam. Seremos 150 participantes (artistas, teóricos, activistas, productores) de 12 networks (Blender, Bricolabs, Creative Labour, Dyne.org, Edufactory, Floss Manuals, freeDimensional Network, Genderchangers, GOTO10, Microvolunteerism, MyCreativity y Upgrade!). Estaremos juntos durante 5 días en sesiones de grupo (cada uno con el suyo), sesiones plenarias (para debatir temas comunes), comidas y actividades nocturnas. Imposible que no ocurra algo interesante.

Mi grupo es MyCreativity, sobre la crítica a las industrias creativas y mi contribución versará sobre la novia que todo el mundo quiere tener: la innovación. Sobre MyCreativity, para los y las interesadas, esta es la url del evento que celebraron en 2006, aquí los materiales que resultaron (incluido un libro muy recomendable) y aquí la memoria de lo que ocurrió generosamente entregada a la red by YProductions en castellano.

De todas formas, lo más interesante del Winter Camp es posiblemente el trabajo del meta-grupo del propio Institute of Network Cultures que se encarga de acogernos, observarnos y alimentar la teoría/práctica de los organized networks (en cristiano, redes organizadas). La intro del Camp dice así:

Cuando una red se asienta y ya no es tan nueva, puede ser un reto mantener el nivel de actividad. ¿Debería entonces la red transformarse en una red organizada? Organizar una red no significa necesariamente disminuir el nivel de espontaneidad y cambiarla por normas y jerarquías: también puede ser una oportunidad para el intercambio y la producción sostenible de conocimientos. Como dice Ned Rossiter en su su libro “Organized Networks” (2006), los encuentros cara a cara son cruciales “si la red debe mantener el ritmo, revitalizar la energía, consolidar viejas amistades y descubrir otras nuevas, refundir ideas o planear actividades”. El Network Cultures Winter Camp es un medio para esas redes que necesitan apoyo para encontrarse, conspirar, discutir y seguir adelante.

El concepto político de las redes organizadas es claro: inventar nuevas formas institucionales inmanentes a la lógica de las redes. El Camp es una exploración de cómo hacer esto, cómo serían esas instituciones, qué harían, cómo operarían en distintos contextos geopolíticos, cómo se financian, cómo sería su relación con otras instituciones, etc. El meta-grupo tiene por objetivo proporcionar una panorámica de las estrategias de las redes con potencial para las colaboraciones entre-redes. Esta es la dimesión escalada de las redes organizadas: cómo se puede crecer y mantenerse sin caer en la introversión y no sólo inventar e innovar sino también usar las formas de red para implementar cambios a nivel social.

Consciente de lo arduo de la tarea, el meta-grupo se centra en algunos temas concretos y muy realistas, directamente relacionados con la vida diaria de los networks: la redimensión (a lo grande o a lo pequeño), la gestión de los conflictos personales, las colaboraciones entre-redes, los aspectos legales y financieros, la cultura (entendida como filosofía de vida) de los networks, la propiedad intelectual, la tecnología adecuada y la difusión de sus actividades.

No creo que una vez allí tenga tiempo de blogear pero los blogers del Institute for Network Cultures lo harán muy bien en su web, en Twitter (¿y esto qué es?) y en Facebook. Y cómo no esta entrada va directa a la carpeta de activismo digital post-dos-punto-cero.

La imagen es de “The Busy Book” de Ali Mitgutsch (1976) puesta online por pinetree4com.

Posted in hacking, new media art, nueva y vieja economia, post dos-punto-cero, post-politicas, sociedad red | Leave a comment

La sociología es un deporte de combate

Iluminador y super divertido. El documental “La sociología es un deporte de combate” con y sobre el sociólogo francés Pierre Bourdieu, que tenía pendiente de ver desde hace años, es una pequeña joya. Tanto si conoces su obra como si no. Muestra el backstage del intelectual comprometido que se mueve como pez en el agua en los terrenos pantanosos en los que otros se ahogan. Hábil y astuto, sorprendentemente empático, Bourdieu se enfrenta a sus propias contradicciones de académico supermediatizado, referente de la inteligentsia francesa de la segunda mitad del siglo XX, y sale airoso y hasta reforzado.

En su caso, esas contradicciones han estado presentes a lo largo de toda su carrera sobre todo a raiz de su experiencia en la Argelia francesa, antes y después de la guerra de independencia (el episodio más traumatico de la historia reciente de Francia junto con el gobierno de Vichy). Allí comienza su colaboración con el sociólogo argelino Abdelmalek Sayad y el estudio de las formas familiares en la sociedad tradicional de la Kabylie que inspirará “La dominación masculina”, una obra incómoda y muy valiente sobre los mecanismos inconscientes del sexismo. Vamos, que es -era, murió en 2002- un tipo que no temía meterse en líos.

La cámara le sigue en conferencias, entrevistas, viajes, visitas a su editora y tiempos muertos en su despacho del reputadísimo Collège de France (qué emoción verlo por dentro y qué cutre, como todos los establecimientos públicos en Francia). En una entrevista en una radio de banlieu se lanza a explicar las bases de su pensamiento entre cortes de rap y bajo la mirada inquisidora del locutor, un joven beur (francés de origen árabe, en argot):

Las desigualdades sociales se perpetúan por la transmisión no sólo del capital económico sino también del capital cultural. Y el capital cultural empieza por el dominio del lenguaje.

Uno de los momentos álgidos es una conferencia en un barrio de las afueras de Paris, ante un auditorio electrificado que lo pone contra las cuerdas.

Yo he estudiado las condiciones de vida del Maghreb antes de que nacierais muchos de los que estais aquí. Conozco vuestra realidad mejor que vosotros mismos. Teneis razón en todas vuestras críticas pero deberíais leer a Abdelmalek Sayad. Si lo rechazais con el pretexto de que es un intelectual es que sois una banda de idiotas.

En la presentación de “La dominación masculina” en Barcelona se deja entrevistar por algunas feministas que lo acusan de machismo:

La dominación simbólica funciona porque el dominado no es consciente de que lo es y se hace cómplice del dominador. A este le toca el mejor papel, el del protagonismo y la visibilidad, pero también es víctima de su condición. En el libro he incluido un capítulo inspirado en la obra de Virginia Wolf que habla de esto: del sufrimiento del dominado”.

Interrogrado por las características femeninas, dice que una de ellas es

la docilidad, que no es una condición natural sino fruto de los mecanismos de dominación, pero en la raiz latina significa: el que aprende.

En mitad de una de las grabaciones un mensajero le trae una carta de Godard con fotos de la película que está rodando en esos momentos, Histoire(s) du Cinéma. Bourdieu la lee en voz alta:

Como todo lo que hace, es muy misterioso. Se nota que tiene talento, que tiene algo que decir, un montón de poesía. Pero no entiendo nada.

Y dejo de destriparos el documental. En Google Video está en francés y ACTUALIZANDO: en este link que me pasa el majo de Ruben Zemos con subtítulos en castellano.

Posted in audiovisual, feminismos, post-colonial | 1 Comment